El Lenguaje de las Piernas

Posición de las piernas

Las piernas juegan un papel muy interesante en el lenguaje corporal. Al estar más alejadas del sistema nervioso central (el cerebro), nuestra mente racional tiene menos control sobre ellas y les permite expresar sentimientos internos con mayor libertad.

Cuanto más lejos del cerebro esté una parte del cuerpo, menor control tienes sobre lo que está haciendo.

lenguaje corporal piernas

En general el ser humano está programado para acercarse a lo que quiere y alejarse de lo que no desea. La forma como alguien sitúa sus piernas puede darte algunas de las pistas más valiosas sobre la comunicación no verbal ya que te estará señalando hacia donde quiere realmente ir.

El pie adelantado: el pie más avanzado casi siempre apunta hacia donde querrías ir. En una situación social con varias personas también apunta hacia la persona que consideras más interesante o atractiva. Si quieres que alguien de forma emocional sienta que le estás dando toda tu atención, asegúrate de que tus pies están encarados hacia él. De la misma manera, cuando tu interlocutor apunta con sus pies hacia la puerta en lugar de hacia ti es una señal bastante evidente de que quiere terminar la conversación.

Piernas cruzadas: es una actitud defensiva y cerrada que protege los genitales. En el contexto del cortejo, puede comunicar rechazo sexual por parte de la mujer hacia el hombre. En una situación social, que haya una persona sentada con brazos y piernas cruzados probablemente signifique que se ha retirado de la conversación. 

Sentado con una pierna elevada apoyada en la otra: típicamente masculina, revela una actitud competitiva o preparada para discutir; sería la versión sentada de exhibición de la entrepierna.

Piernas muy separadas: otro gesto básicamente masculino que quiere transmitir dominancia y territorialidad.

Sentada con las piernas enroscadas: en las mujeres, habitualmente significa cierta timidez e introversión.

Sentada con una pierna encima de la otra en paralelo: varios autores reconocen que en las mujeres puede interpretarse como cortejo al intentar llamar la atención hacia las piernas, puesto que en esta postura quedan más presionadas y ofrecen un aspecto más juvenil y sensual.