Las Manos También Hablan

No solamente presentadores, actores o personas que tienen trato con el público deben saber cómo utilizar las manos para reforzar lo que dicen sus palabras.

Hay que tener claro que, consciente o inconscientemente, las manos acompañan cuando hablamos y se mueven al ritmo de la conversación.

Las manos nos ayudan a señalar una cosa o una persona e igualmente nos ayudan a crear magnitud de las cosas que pueden ser pequeñas o grandes.

Desde el punto de vista de la comunicación, las manos sirven para ilustrar y aportar información al mensaje que se desea transmitir, por lo que  sirven para reforzar un mensaje y sus dedos nos ayudan a señalar o enumerar las cosas de las cuales hablamos.

Las manos también pueden servir para reforzar o explicar sentimientos, nos ayudan a pedir calma, reclamar silencio, conceder un momento, o para expresar dureza, rabia, ira cuando se utilizan de forma agresiva. Podemos entonces señalar con el dedo, cerrar el puño y hacer un gesto de golpe.

He aquí algunos gestos con las manos:

Si mostramos la palma abierta: expresamos sinceridad y honestidad, mientras que cerrar el puño muestra lo contrario.

Si ponemos las manos en los bolsillos: denota pasotismo.

Si enfatizamos algo con la mano: si por ejemplo alguien ofrece dos puntos de vista, con la ayuda de la mano, dominante reforzará la opción que más le gusta lo refuerza.

Si entrelazamos los dedos de ambas manos: transmitimos una actitud reprimida, ansiosa o negativa.

Si ponemos la punta de los dedos unidas: expresamos confianza y seguridad, y según el caso arrogancia.

Si sujetamos las  manos por la espalda: es un intento de autocontrol, expresa frustración o un intento de disimular el nerviosismo.

Si por el contrario, especialmente los hombres, mostramos los pulgares por fuera de los bolsillos: representa un intento de demostrar confianza y autoridad frente a las mujeres. 

Cuando más bien ocultamos sólo los pulgares dentro de los bolsilloses una actitud sexualmente abierta que realizan los hombres para mostrar ausencia de miedo o interés sexual, es una postura que enmarca y destaca la zona genital.

Y por último, si nos llevamos las manos a las caderas: podría indicar superioridad en su círculo social como para aparentar mayor masculinidad y una actitud sutilmente agresiva. Mientras más se exponga el pecho, mayor agresividad comunicará.